El más grande engaño de la historia olímpica

A menos de cuatro meses del inicio de los Juegos Olímpicos, retrocedemos en el tiempo 24 años para recordar el escándalo más grande de la historia más grande de esta gran evento. Los Juegos de Seúl 1988 fueros testigos de una de las finales más esperadas de la prueba cumbre de la velocidad: los 100 metros planos. Cara a cara se iban a ver los dos colosos del momento: el norteamericano Carl Lewis, que emuló al mítico Jessie Owens en Los´Ángeles 1984 con cuatro otros; y el canadiense Ben Jhonson campeón mundial de esa época y recordman con 9.83 segundos. La mesa prometía y estaba muy bien servida.

En la previa, el favorito era Carl Lewis. Había salido victorioso en los enfrentamientos entre ambos previos a los Juegos. Además, había marcado 9:78 (con viento ilegal) en los temibles "trials" (eliminatorias olímpicas en EE.UU) y en las clasificatorias y semifinales en Seúl había vencido con relativa facilidad. Jhonson, como era su característica en las grandes competiciones, clasificaba con lo justo bajando siempre su rítmo en los metros finales por lo que los críticos no estaban seguros de su verdadero poderío. Junto a ellos destacaban entre los finalistas el británico Lindford Christie (campeón olímpico cuatro años después en Barcelona), el norteamericano Calvin Smith (ex record del mundo) y el brasilero Robson Caetano Da Silva (último sudamericano que lograría llegar a una final olímpica de esta distancia).

Ben Jhonson era conocido por tener una reacción al disparo de salida más rápida de lo normal. En la largada, el canadiense picó en punta sacando una distancia que sería indescontable. Nunca perdió esa diferencia en toda la carrera. Lewis miraba sufriendo la gloria desde atrás mientras luchaba por el segundo lugar palmo a palmo con Christie y Smith. El mundo quedo sorprendido y maravillado. El tiempo de Jhonson fue de ensueño: 9.79, nuevo record del mundo. Lewis fue segundo y Christie tercero.

El escándalo llegó tres días después. El análisis antidoping de Ben Jhonson dio positivo al encontrarse muestras de estanozolol siendo suspendido por dos años. En 1993, reincidió al volver a dar positivo en otro análisis esta vez por exceso detestosterona siendo suspendido de por vida por la IAFF. Los aficionados al deporte sufrimos una gran decepción con "Big Ben".

El inolvidable Drazen Petrovic

Ayer sábado 22 se cumplió un aniversario más del nacimiento del inolvidable basquetbolista croata Drazen Petrovic. Hubiera cumplido 47 años. Integrante de uno de los mejores equipos de la historia, la Yugoslavia subcampeona olímpica en Seúl 1988 y campeona mundial en Argentina 1990, donde formo un duo inolvidable con Vlade Divac. Ese inolvidable quinteto fue víctima de la guerra de los balcanes ya que por ella se tuvo que desmembrar un año después. Producto de este maldito conflicto bélico, la dupla Petrovic-Divac se disolvió perdiendo de paso ambos una gran amistad que llevaba años. En Barcelona 1992, Drazen obtuvo la medalla de plata ahora defendiendo ahora a Croacia teniendo como compañeros a Toni Kukoc (campeón años después de la NBA con Jordan y los Chicago Bulls) y Dino Radja, todos ellos "sobrevivientes" de aquella mítica Yugoslavia.

En aquella oportunidad, la guerra nos privó a todos los amantes del basquet de ver una final de ensueño entre Yugoslavia con todas sus estrellas y el Dream Team de Michael Jordan y Magic Jhonson. Drazen era un base con un talento endemoniado y un letal tiro de tres puntos. Una de sus peculiaridades era abrir la boca antes de cada lanzamiento de tiro libre. Falleció en un accidente de tránsito en Alemania en 1993 cuando brillaba en la NBA en los New Jersey Nets. A modo de homenaje, les dejo un video de un partidaso la final de la Recopa de Europa de 1989 entre el Real Madrid (donde jugaba Petrovic) y el Caserta donde brillaba el mejor basquetbolista brasilero de la historia, Oscar Schmidt. Un espectacular duelo entre ambas estrellas del baloncesto: 62 puntos de Drazen contra 44 de Oscar.

Solo la nieve pudo con Peñarol

Ese fue el título de la recordada y querida revista argentina El Grafico para este partido. Tal vez uno de los más impresionantes que vi en mi vida, no por el nivel de calidad sino por la impresionate nevada que cayó en los 120 minutos de juego. Era la Copa Intercontinental 1987 en Tokio tiempos en que sonaban esas interminables bocinas japonesas durante todo el partido. Enfrente estaban el corajudo Peñarol, dirigido por el Maestro Oscar Washington Tabarez, actual campeón de América con la celeste. En la Libertadores de ese año habían eliminado a San Agustín y Alianza, en la última Libertadores disputados por los finaditos potrillos. De otro lado estaba el Porto, en el que jugaban el arquero polaco Mlynarczyk y el argelino Rabah Madjer, un gran jugador de la década de los 80s. En los uruguayos recuerdo al arquero del bigote Eduardo Pereyra, Matosas, Herrera, Dominguez y de punta jugaba el ex dt de Alianza Diego Aguirre. Muchos de ellos meses antes habían ganado la Copa América disputada en Argentina. El encuentro lo dominó casi en su totalidad el equipo sudamericano pero los portugueses lo ganaron de contra en suplementario 2-1. Les recomiendo el segundo gol una joyita de Madjer.

A veinte años de una hazaña del "chato" Jaime Yzaga

En pleno Open de Australia en desarrollo, los amantes del tenis empezamos a hacer nuestros pronósticos en quien levantará la copa del primer Grand Slam del primer año el próximo domingo 30 en el Rod Laver Arena. Yo no tengo un candidato firme, los candidatos naturales son Roger y Rafa pero pueden haber sorpresas. Casi nadie se acuerda que hace 20 años (como pasa el tiempo), el gran Jaime Yzaga llegaba a cuartos de final en este importante torneo.

Jaime dueño de un tenis exquisito con una depurada técnica y cuyo mejor golpe era un hermoso revés a una mano, fue el outsider de ese torneo (que al final lo acabó ganando Boris Becker). En primera ronda derrotó al checo Daniel Vacek. Posteriormente, superó al holandés Michiel Schapers y en un durísimo encuentro en tercera ronda al americano Jimmy Arias (ex top ten) en cuatro sets. En octavos de final, lo esperaba el sueco Mats Wilander ex número 1 del mundo y ex campeón de Australia, Roland Garros y el US Open.

El encuentro fue una verdadera batalla. Jaime se impuso en cinco dramáticos sets por 7-5, 2-6, 6-1, 3-6 y 6-1 logrando acceder por primera vez a cuartos de final de un torneo de Grand Slam. En esa etapa no pudo ante el talentoso sueco Stefan Edberg, quien en ese entonces número 1 del mundo y era dueño de un vistoso juego de saque y volea, cayendo en tres sets.

El talentoso peruano lograría tres años después llegar nuevamente a cuartos de final de un torneo grande en el US Open, donde venció en octavos de final a Pete Sampras. Ahora que estamos viendo las instancias decisivas de este Open de Australia, con que nostalgia extrañamos los peruanos a un compatriota siquiera en la llave principal de este prestigioso torneo. Como quisiera retroceder el tiempo 20 años y poder ver jugar de nuevo al gran Jaime. Tiempos aquellos...

Finales históricas del US OPEN

Este lunes comienza el último Grand Slam de la temporada el US Open. Desde el retiro de Lucho Horna, da nostalgia no poder ver representantes peruanos en el cuadro principal. En el recuerdo quedó la gran participación del chato Jaime Yzaga quien en 1994 derrotó a Pete Sampras y llegó a cuartos de final quedándose a un paso de semifinales al caer en cinco sets ante el checo Karel Novacek A manera de antesala recuerdo cinco de las mejores finales de los últimos veinte años en la rama masculina:

1990: Sampras vs. Agassi. En ese momento fue una final sorpresiva. Nadie podía imaginar la cantidad de títulos que lograran ambos con el paso del tiempo. Los dos eran muy jóvenes. Andre tenía 20 años y Pete 19. Los favoritos en la previa eran Edberg, Becker y Lendl. Era la primera final de un grande para Sampras. Agassi buscaba su revancha luego de caer ese año sorpresivamente en la final de Roland Garros ante el ecuatoriano Andrés Gómez. Sampras venció claramente 6-4 6-3 y 6-2 a un Agassi a quien la camiseta de favorito le quedó muy grande en aquella ocasión.

1992: Edberg vs. Sampras. El sueco Stefan Edberg era uno de mis jugadores preferidos de antaño. Un jugo clásico de saque y una exquisita volea. No poseía una gran potencia pero si una depurada técnica. Ese año, Stefan buscaba repetir el plato del año anterior y Sampras tenía la oportunidad de ser número 1 por primera vez. Sampras no soportó la presión y el sueco mostrando un gran aplomo ganó 3-6, 6-4, 7-6 y 6-2 recuperando de paso el número 1 del mundo.

1995: Sampras vs. Agassi. Un mano a mano por el número 1 del mundo. Ambos estaban en su apogeo. Agassi había campeonato en Australia y Sampras en Wimbledon. Agassi tenía la mayor preferencia del público en ese momento su pareja era la famosa actriz Brooke Shields lo que aumentaba el interés mediático del encuentro. Fue una de las mejores finales entre ambos. Sampras volvió a imponerse 6-4 6-3 4-6 y 7-5.

2002: Sampras vs. Agassi. Todas las finales entre Pete y Andre fueron especiales. Esta fue la tercera en Nueva York. En aquella ocasión Sampras tenía ya 31 años y Agassi 32. Sampras llevaba más de dos años sin ganar un torneo grande y muchos dudaban si volvería a conseguir alguno. Sampras volvió a imponerse por 6-3, 6-4, 4-6, 7-5 demostrando su paternidad sobre Agassi en las grandes finales.

2005: Federer vs. Agassi. A los 35 años, Agassi llegó por última vez a la final de un torneo grande y lo hizo en casa. En frente, tenía al suizo Roger Federer quien se encontraba en plena forma y con el paso del tiempo se convertiría en el jugador más ganador de todos los tiempos. El mítico jugador oriundo de Las Vegas no pudo ante Roger y cayó 3-6, 6-2, 6-7 y 1-6.

¿Quién será el nuevo rey en Nueva York?

Desde el lunes 30 de agosto, todas las miradas de los fanáticos del tenis de mudarán a Nueva York con el inicio del cuarto Grand Slam de la temporada: el U.S. Open. Lamentablemente será la tercera ocasión en la era abierta que el campeón defensor masculino no podrá defender su título: Juan Martín Del Potro no se recuperó a tiempo de su larga lesión en la muñeca y quedó descartado. A continuación un análisis de los principales favoritos del evento:

El Rey Roger. Es mi candidato y el de la mayoría. Luego de su gran decepción en Wimbledon, Roger contrató como entrenador a Paul Annacone, ex entrenador de Pete Sampras y Tim Henman. Antes de Toronto realizó declaraciones muy motivadoras de su parte deseando llegar a los veinte Grand Slam. Parece que Roger habló en serio: Llegó a la final en Toronto y ganó Cincinnati ganándole en la final a un sorprendente Mardy Fish. Con esto, Roger demostró que es el principal candidato al título y va en busca de recuperar el número 1 del mundo.

Murray quiere su primer grande. El escocés llega a Nueva York con grandes aspiraciones. Luego de su fracaso en Wimbledon al perder en semifinales con Nadal, Murray arrancó con todo la temporada de cancha dura en Norteamérica: Ganó el título en Toronto venciendo a Roger y en Cincinnati llegó a cuartos donde, exhausto, cayó en un polémico partido ante Mardy Fish. Hace dos años llegó a la final. ¿Se podrá sacar el clavo Murray?

El corazón de Rafa. Rafa llega a Nueva York como número 1 del mundo y luego de haber hecho la hazaña de ganar en fila Roland Garros y Wimbledon. Buscará ser el primer hombre luego de Laver en ganar en fila en Paris, Londres y Nueva York. A Rafa siempre le ha costado jugar este torneo. En este tipo de canchas, sus rodillas sufren más de la cuenta. Es el único grande en que nunca pudo llegar a la final. En Toronto perdió en semifinales ante Murray y en Cincinati en cuartos ante Baghdatis. No llega bien, pero el corazón de Rafa es a prueba de todo.

¿Nole lo logrará? Luego de un gran 2008 donde ganó Australia y el Masters, la mayoría de especialistas pensó que Novak se iba a meter de lleno a la lucha por el número 1. Pero luego de estos triunfos, el serbio no ha llegado a concretar lo que insinuó con su gran talento dando muestra de displicencia y falta de valor en los momentos cumbres. Pero Nole tiene el talento suficiente para aspirar a su segundo Grand Slam.

Estos son a mi criterio los cuatro grandes candidatos. También hay un grupo de jugadores que en una tarde inspirada pueden tumbar a cualquiera como Mardy Fish, David Nalbandian, Marcos Baghdatis, Andy Roddick, Thomas Berdych y Robin Soderling. Dentro de siete días, se vienen dos semanas a puro tenis. A disfrutarlas!

El león inglés

Hace 18 años, un 16 de agosto de 1992, el corredor de Fórmula 1 más sufrido y espectacular de todos los tiempos gritó campeón por primera y única vez. Nigel Mansell, el león inglés, logró el segundo lugar en Hungaroring siendo inalcanzable para sus rivales. Esa temporada obtuvo el título de manera contundente ganando nueve carreras de las dieciséis en disputa. Este título puso fin a una racha interminable de mala suerte y frustraciones. En 1986, cuando tenía todo servido para ser campeón, se le reventó un neumático a su Williams Honda en la definición de Australia cuando en tercera posición muy cómodo (ese lugar le bastaba para ser campeón). Un año después se jugaba el título con su compañero, el brasilero Nelson Piquet. Mansell era más veloz pero en la clasificación de Susuka sufrió un accidente que terminó con sus opciones. El 1991 volvió a pelear el campeonato pero la mala suerte de nuevo estuvo cerca de él: En Canadá abandonó a escasos metros de la línea de llegada y en Estoril sus mecánicos le colocaron mal un neumático obligándolo a abandonar cuando tenía la victoria prácticamente asegurada en ambas carreras. Esos 18 puntos fueron cruciales en una cerrada definición con Senna que se definió en Susuka con un nuevo abandono del inglés. Su estilo fue agresivo y fue siempre al límite. A sus fanáticos se les ponía la piel de punta al verlo pilotear. Fue todo un showman. Hubo una pasada a Gerhard Berger en México que es espeluznante, tal vez una de las mejores de la historia. Para mí sin discusión fue el mejor rival que tuvo Ayrton Senna en pista. El rueda a rueda que tuvieron ambos en Barcelona es mito. Las chispas de las ruedas saltaban y ninguno de los dos cedía. Las cinco últimas vueltas de Mónaco 1992 cuando ambos se jugaron por la victoria a cara de perro son inolvidables para todos los fanáticos de la F1. Les dejo este gran especial del león en Youtube.